¿Cómo guiar la transformación digital de tu empresa?

La transformación digital busca cambiar las empresas existentes, en su propósito, estrategia, estructura y planes de acción utilizando las potentes tecnologías que existen hoy en día. Es decir, se trata de adaptar a las organizaciones actuales a las nuevas condiciones ambientales de funcionamiento de la sociedad, con la ayuda de diversas tecnologías, y además, muy importante, de un cambio de mentalidad de toda la organización, partiendo por la alta gerencia y los directores de la misma.

Existen variados ejemplos de cómo diversas organizaciones han sabido adaptarse y han cambiado su modelo de negocio para poder subsistir e, incluso, hoy en día estar en posiciones de liderazgo en diversos sectores.

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Un ejemplo de ello, es la conocida Enciclopedia Británica, la cual dejó de producir su versión analógica después de 244 años para enfocarse en su oferta digital. De hecho, en los últimos años previos a esta decisión, la edición impresa representó menos del 1% de los ingresos de Britannica. Actualmente, es una organización de educación en línea que trabaja con colegios e instituciones de educación, produce material educativo y un sinnúmero de actividades complementarias.

Otro caso es el de la cadena de librerías Barns & Noble, la que se tuvo que enfrentar con el gigante tecnológico Amazon. Para hacerle frente, la respuesta de la empresa, obviamente, incluía la generación de un sitio de venta electrónica. Sin embargo, no se quedaron ahí, aprovecharon la gran cantidad de tiendas físicas que tenían, para ofrecer café y que las personas pudieran sentarse a disfrutar de un buen libro.

Si bien es necesario realizar cambios  de este estilo, llevar adelante este proceso es un gran desafío. Hoy en día existen variadas metodologías creadas por grandes empresas consultoras y prestigiosas universidades que buscan alivianar la carga. En DIGEVO, hemos estudiado muchas de ellas y experimentado para sacar lo mejor de ellas. En nuestro proceso,  encontramos que la mejor y más robusta es la denominada Cinco Dominios de la Transformación Digital, de la Universidad de Columbia, Nueva York, Estados Unidos.

Dicha metodología creada por el profesor David Rogers muestra cinco grandes temas que deben ser tocados en todo proceso de transformación digital.  El proceso comienza al plantearse la pregunta de cómo una organización que nació antes de la era de internet puede adaptarse para sobrevivir y crecer en el momento actual. Para esto, se deben tocar los siguientes puntos:

1.  Interacción con los clientes: Aprovechar las redes de clientes.
2. Nuevos formatos de competencia: Construir modelos de plataformas, no sólo productos.
3. Trabajar con Big Data: Convertir los datos en los activos de la empresa.
4. Innovación:  A través de rápida experimentación.
5. Transformación: Adaptar la proposición de valor

Interacción con los clientes

Los clientes siguen siendo lo más importante para las empresas, pero la era digital ha cambiado el papel del comprador moderno y los canales de interacción con las empresas.

El modelo tradicional, en el que el comprador estaba influenciado por la publicidad masiva, ha sido reemplazado por estructuras de red dinámicas donde el feedback funciona de manera mucho más efectiva, ya que las personas se comunican entre sí y la lealtad con el cliente se valora cada vez más. 

En el mundo digital, las empresas se deben involucrar más con sus clientes e involucrarlos activamente de una manera que puedan influir en los demás. Las organizaciones deben cambiar continuamente sus procesos, políticas, productos, etc. para responder a las necesidades cambiantes del cliente.  Para esto es necesario mapear las rutas para comprar de los clientes y comprender sus motivaciones, con el fin de mejorar cada una de ellas.

Nuevos formatos de competencia

Antes las empresas competían dentro de su misma industria. Sin embargo, ahora han aparecido competidores fuera de esta, ya sea disruptores u otras empresas que han cambiado su modelo de negocios, por lo que se está dando también una cooperación entre los antiguos competidores de la industria. Por ejemplo, los sellos discográficos competían entre sí, pero actualmente se deben apoyar mutuamente frente al ingreso de empresas de streaming como Spotify.

Dentro de estos nuevos formatos de competencia están los modelos de plataforma, que son sistemas que sirven como base para la interacción directa entre diferentes grupos de personas, proporcionando grados de libertad, pero, al mismo tiempo, regulando esta interacción.

El uso generalizado de plataformas está cambiando el modelo competitivo y las relaciones entre las empresas, desde modelos de negocios lineales a otros basados en efectos de red, y los activos de las compañías se perciben de manera diferente.

Trabajar con Big Data

Los datos siempre han existido, pero su rol en esta nueva era es fundamental. Los datos se han convertido en el activo intangible más importante de la empresa, ya que se han comenzado a generar por todas partes (datos de clientes, datos de procesos, datos de sensores, etc.) y, además, el costo de almacenamiento y procesamiento ha descendido en los últimos años, logrando sacarle un mayor provecho a esta Big Data.

Muchas empresas reconocen que el big data y el analisis de datos son cruciales para transformar sus operaciones empresariales. Sin embargo, es importante considerar que al crear una estrategia de datos se debe comenzar con las fuentes de datos existentes para posteriormente pasar a revisar nuevas fuentes de datos que sea necesario incorporar.

Innovación

La innovación es el cambio que agrega valor a un producto, proceso o servicio. En este mundo digital que actualmente estamos viviendo, la innovación nace de una constante iteración de experimentación.

Estos experimentos continuos nos permiten rápidamente poder probar las hipótesis sobre nuevos productos o servicios y evitar una gran cantidad de trabajo analítico sin retroalimentación durante la generación del mismo.

Estos experimentos se materializan en lo que se denomina productos mínimos viables (MVP por sus siglas en inglés), con los cuales se prueba de manera funcional y con interacción de posibles clientes si se resuelve la problemática planteada inicialmente.

Transformación de valor

El mundo digital ha transformado el valor de las propuestas presentadas por las empresas que, por lo general, tenían muy pocos cambios y eran muy estables. Lo que hoy requieren los clientes es flexibilidad y personalización.

Un buen ejemplo de esto son los corredores de propiedades, cuyo valor antiguamente residía en tener información sobre las diversas viviendas del mercado. Pero, hoy esa información está disponible en internet, por lo que la propuesta de valor del  corredor de propiedades ha migrado hacia ser consultores especializados que pueden entregar recomendaciones personalizadas sobre lo que el cliente está buscando incluyendo colegios, servicios y otros intereses.

Para desarrollar una nueva propuesta de valor, debemos comenzar por analizar los distintos segmentos de clientes y cómo la actual propuesta de valor cumple o no con sus necesidades. Luego, se analizan las disrupciones tecnológicas que están presentes para ese mercado y con eso se generan nuevos elementos de valor, los que se testean con los clientes, para así iterar hasta llegar a la nueva propuesta de valor basada en las tecnologías disponibles

Hemos visto brevemente como la tecnología digital está cambiando los principales procesos estratégicos, y cómo las empresas para adaptarse a esta nueva realidad deben trabajar en cinco dominios: clientes, competencia, datos, innovación y valor. En Digevo estamos comprometidos con este cambio para lo cual tenemos consultores especializados y certificados en las distintas metodologías presentadas, incluyendo los Cinco dominios de la Transformación Digital. 

Las empresas se encuentran ante una disrupción nunca antes vista, que requiere una profunda comprensión del cambio y una gran capacidad de adaptación para hacer frente a grandes desafíos. A través de nuestros servicios para empresas, podrás cambiar el paradigma, evolucionar y adaptarse a los mercados dinámicos, logrando llevar a la realidad nuevas unidades de negocio que respondan a dichos desafíos y sean una fuente de ingresos.